Este artículo es una pequeña reflexión sobre los niveles que
se pueden trabajar dentro de la práctica de una determinada técnica, ya que a
veces la mejor manera de avanzar es parar y analizar lo que hacemos, el porqué
y para qué.
Lo principal es el trabajo correcto del kihon, algo que se reflejará en todas las técnicas que realicemos.
Quizás a algunos se les haga pesado volver a practicar golpes, desplazamientos,
caídas, esquivas, bloqueos, etc., una y otra vez, pero son los cimientos de las
técnicas que se practican. Y sin unos buenos cimientos…
Normalmente, cuando estamos en el dojo, el instructor muestra una técnica, explica los puntos fundamentales de ésta y luego nos toca a
nosotros. Aunque el instructor siempre estará para ayudarnos en todo y aclarar
nuestras dudas, no hay que olvidar que el esfuerzo ha de ser nuestro.
El primer nivel es la paciencia, no hay nada de malo en
empezar lentamente con la técnica que estamos trabajando, de hecho, es
necesario. Nuestro compañero ha de realizar el ataque correctamente y nosotros
aplicar la técnica teniendo en cuenta los puntos que nos han dado,
asegurándonos que son correctos nuestros desplazamientos, bloqueos, ángulos,
posiciones y respuestas. No tiene sentido dejarnos llevar por la prisa si no
estamos entendiendo lo que hacemos.
Tras haber asimilado lo anterior, ya podemos subir al
siguiente nivel. Nuestro compañero aumenta la velocidad y la intensidad de su
ataque, (pero no al 100%, no me seáis impacientes…), aquí empezará a verse no solo si hemos
entendido los detalles de la técnica, sino si nuestro kihon es bueno.
Es fundamental la ayuda de nuestro compañero y
nuestro instructor para corregir los errores que hayamos cometido y trabajar
sobre ello. Un aspecto que considero importante es nuestra actitud mental, ya
que mientras vaya aumentando la intensidad, más necesario se nos hará mantener
la calma y una mente receptiva para adaptarnos a los cambios.
Ahora podemos dar otro paso más, ya hemos asimilado la
técnica, hemos corregido errores…nuestro compañero puede buscar puntos flacos
en nuestro desarrollo y buscar alguna contra…esto nos ayudaría a la mejor
comprensión de la técnica que estamos trabajando tanto para realizarla de tal
manera que contrarrestemos posibles reacciones de él como para responder ante
ellas.
Desde mi punto de vista, esta es una parte muy “divertida” e
interesante. No desanimaos si al principio os bloqueáis, es cuestión de
practicar y dejar el ego en casita.
Bien, hay otro nivel en la práctica, pero éste debería estar
reservado a gente con mucha más experiencia a sus espaldas, hacerlo bajo la atenta supervisión del
instructor y usando las protecciones necesarias.
Coged una técnica que creáis
que domináis, ahora vuestro compañero irá a por vosotros con su ataque…y
recordad que la derrota y la victoria son dos caras de la misma moneda.
Shihan 11º Dan Bujinkan
5º Dan Defensa Personal FVK
1er Dan Federación Española Kick Boxing
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